Somos unos mierdas.

Tengo abandonado el blog, lo sé, pero hoy lo usaré a modo de desahogo.

Somos unos mierdas. Lo tengo comprobado. Trabajo actualmente de noche en un hotel y tengo un "grupito" de tulipanes futbolistas aficionados al deporte y a hacer el payaso, y me he dado cuenta de que somos unos mierdas.

No sé si en su país o en su casas darán el por culo que están dando aquí, pero estos impresentables llevan 4 días rompiendo ya mi malherida ilusión por trabajar en un hotel, por estar al servicio del turista, por intentar hacer sus vacaciones mejores. Anda y que les den por culo, a muchos, y mucho.

Os estareis preguntando, ¿porque dices entonces que somos unos mierdas?

Pues lo somos, por permitirlo. Esta gentuza viene aquí a destrozar, a hacer el payaso y a joder a todo el mundo como no pueden hacerlo en sus países. Y nosotros somos unos mierdas, porque lo permitimos. Empezando por el jefe, que sabe de más lo que va a llegar con este tipo de "reservas" en grupo, y siguiendo por la policía que trata a esta gentuza con mano izquierda. Ellos (los turistas) lo saben, y se sienten seguros. Licencia para comportarse como auténtica escoria, total, no me va a pasar nada, carta blanca.

Uno de ellos, en una de mis frustradas intervenciones para intentar establecer la paz y el orden, y de hacerles comprender a un grupo de borrachos impresentables que hay gente normal que quiere dormir (iluso de mí), me ha llegado a preguntar, y escribo casi literalmente.

Cliente: ¿Cúal es el problema?

Yo: El ruido.

Cliente: ¿Que consecuencias hay si seguimos así?

Yo: No las habrá si no seguís así.

 

En fin, suspiro por no llorar.

Pobre gente de bien que viene a pasar unas vacaciones y a descansar y entre unos mierdas y otros, les jodemos sus preciadas vacaciones.